La Escuela Antiopresión es un proceso conformado y dirigido a mujeres, personas racializadas y disidentes sexuales y del género que nos unimos a partir del paro nacional iniciado el 28 de abril del 2021, en la ciudad de Cali, para afrontar de manera colectiva las múltiples opresiones que se exacerbaron en esta situación coyuntural y que produjo diversas formas de violencia. 

Para el Laboratorio Ríos, seres y futuros, en Honda, partimos de algunos mitos que hablan de la energía del río para nombrarle como un ser femenino. El proceso incluyó conversaciones e intercambios de experiencias en torno a la autonomía y la importancia del cuidado ambiental, incentivando la imaginación, revitalizando historias locales sobre la río, sus personajes míticos y el cuidado de la río y el agua. 

A través de los personajes creados exploramos nuestra posición en el cuidado mutuo y del entorno. Esta atención en el cuidado nos permitió fluir y reconocernos en el espacio de convivencia que la residencia ofreció, y así involucrarse cada una desde su saber hacer, en la gestión de espacios de afecto y prácticas de escucha con les participantes del laboratorio.

Un elemento reflexivo importante fue la experiencia interna de desconexión con el entorno ante el orgullo colonial y el racismo estructural que deviene de la identificación con la colonialidad. Las realidades vividas en el lugar nos reafirman en la intención de abrir espacios en los que profundizar sobre las formas de opresión que vivimos cotidianamente, así como afrontar las hostilidades de maneras que nos permitan el bienestar emocional, mental, espiritual y físico.

Agradecemos el proceso y reafirmamos nuestra intención de hablar sobre salud, espiritualidad y un futuro negre, pues son temáticas que requieren más espacio, más tiempo y pensar de manera más profunda en las comunidades con las que nos identificamos.